El pasado 21 de junio fuimos a visitar la Domus, conocida como la casa del hombre. Es el primer museo interactivo del mundo dedicado al ser humano, y el segundo de los tres Museos científicos Coruñeses.

El edificio, obra del arquitecto japonés Arata Isozaki, tiene más de 150 módulos interactivos para divertirse y reflexionar sobre las características de la especie humana.

Ese día fuimos casi todos los compañeros y compañeras de Artefios, con Carmen. Al llegar una guía del Museo nos recibió para que visitásemos el museo. Estuvimos haciendo tiempo antes de entrar a ver el vídeo sobre el mar. También estuvimos aprendiendo a manejar los aparatos expuestos que se podían usar.Estas actividades eran, como indica su página web:

Juego de Neuronas. Piezas de Inteligencia humana.

Es una exposición en la que se exploran la anatomía y el funcionamiento del cerebro. Su elemento más emblemático es una colorida red neural elaborada con neuronas creadas por escolares gallegos.  

En Genética:

Investiga qué es la ingeniería genética, reflexiona por qué nos parecemos a nuestros padres o indaga sobre los productos transgénicos. Además, descubre el código de la vida en las maquetas del ADN de la planta baja de la Domus. Una exposición dedicada a la genética que busca responder a las curiosidades de los visitantes en torno a un tema científico de continua actualidad.

Y en evolución:

Indaga si los rasgos de los que tanto presumimos son exclusivos de la especie humana y verás que no somos el ombligo del mundo. La Domus y los investigadores de Atapuerca presentan un enfoque diferente de la evolución de la familia humana en la exposición Homínidos y Homínidas. La familia presumida. ¿Cuándo dejamos de ser caníbales? ¿Era capaz de hablar el hombre de Neandertal? ¿Quién fue el primer europeo? ¿Cómo vivían nuestros antepasados? ¿Somos tan exclusivos como creemos?

Y en la Medicina personalizada:

Descubre cómo la ciencia del ADN está cambiando la medicina. La Domus dedica un área a las bases moleculares y genéticas de las enfermedades y de sus tratamientos.

Os recomiendo ir al menos una vez a visitar la Domus. He aprendido mucho divirtiéndome.

 CARLOS CRUZ

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información. ACEPTAR

Aviso de cookies